CÓMO HABITUAR A NUESTRO PERRO A VIAJAR EN COCHE SIN QUE TENGA MIEDO
Como bien sabéis muchos de nuestro canes tienen pánico a los viajes en el coche. Para ellos un viaje aunque sea de corta duración es un verdadero suplicio.
En esta entrada en el blog de la Clinica Veterinaria Las Lagunas queremos daros algunos consejos para que vuestro peludito se acostumbre a los viajes en coche y deje de verlos como una tortura.
Pero antes de empezar con los consejos para aquellos perros que ya tienen la fobia al coche desarrollada, vamos a explicar porque algunos perros tienen miedo a los viajes en coche y cómo evitar que desarrollen esta fobia antes de llegar a la edad adulta.
¿Por qué algunos perros tienen miedo a los viajes en coche?
El miedo aparece cuando el perro percibe un peligro. Se trata de una emoción adaptativa que le permite sobrevivir en el entorno en el que vive. Sin embargo, cuando el miedo expresado por el animal es excesivo se considera una fobia. La fobia es una reacción de miedo desproporcionada. Es decir, la magnitud de la reacción no guarda relación con la intensidad del estímulo que la ha provocado. Por lo tanto, la fobia no es una respuesta adaptativa y provoca mucho estrés en el animal.
Existen algunos motivos por los que el animal puede tener miedo al coche. Para poder tratar esta fobia de la forma más eficaz posible, debemos reconocer el origen del problema. Algunas de las causas de la fobia a los viajes en coches son:
- Mareo (nauseas, arcadas, vómitos ansiedad...) Algunos animales solo babean abundantemente durante el viaje. Si esto sucede se debe plantear que es posible que el animal se maree con el movimiento del vehículo.
- Falta de exposición regular al vehículo. No se ha acostumbrado al animal de forma adecuada a los viajes desde pequeño. Para evitar este punto, recomendamos leer el siguiente apartado.
- Miedo al sonido del coche (ruidos, vibraciones, velocidad...).
- Asociación con el veterinario, una perrera o refugio, etc.
- El perro ha sufrido una experiencia traumática relacionada con los coches como por ejemplo: atropellos, accidentes de tráfico...
- Se ha castigado al perro o se le ha forzado a entrar en un vehículo.
- Envejecimiento (síndrome de disfunción cognitiva).
Estudiar al animal en el entorno puede ayudarnos a encontrar una solución al problema. Así, si la causa del miedo es el mareo por el movimiento del vehículo, bastará con administrar la medicación adecuada para evitar que el animal sufra durante el viaje. En la Clínica Veterinaria Las Lagunas podemos asesorarte sobre este tema.
¿Cómo Acostumbrar a nuestro Cachorro a Viajar en Coche?
Durante la Etapa de Socialización del Cachorro debemos presentar al perro todo aquello que vaya a encontrarse en su etapa adulta para que se acostumbre de forma natural. Especialmente, todas aquellas cosas que pueden darle miedo en la etapa adulta: el secador, la aspiradora, el coche, entre otros... De no ser así, cuando finalice la socialización, a los 4 meses de edad, y aparezca el miedo, el perro puede reaccionar de forma negativa ante aquello que desconoce, en este caso a los coches.
Para acostumbrar a los perros a los viajes en coche durante los primeros meses de vida estos son los consejos que se deben seguir, teniendo en cuenta que el periodo de adaptación al coche debe hacerse poco a poco. De esta forma, a cada fase del proceso deberemos dedicarle varios días.
- En la primera fase, comenzaremos introduciendo el perro dentro del coche para que se acostumbre al espacio. Le premiaremos cuándo se muestre tranquilo dentro del vehículo. Debemos dejar que el animal se adapte al nuevo espacio y a los olores del mismo. Después podemos encender el motor del coche para que acostumbre al sonido.
- A continuación, en la segunda fase, pondremos el coche en marcha y haremos un pequeño trayecto para que el perro se acostumbre al movimiento del vehículo. La duración de los viajes en esta fase no debe superar los 10 minutos. Cuando pasemos a esta fase debemos evitar dar de comer al perro, por sí se marea y vomita durante el viaje. Observaremos al animal por sí muestra signos de miedo. Sí muestra miedo, seguiremos los consejos que explicamos en el siguiente apartado y volveremos a la fase anterior.
- En la tercera fase, comenzaremos a incrementar la duración de los viajes. Estos deben variarse. No es recomendable llevar al perro al mismo lugar porque puede asociarlo con el destino, por ejemplo la visita al veterinario, e igualmente desarrollará miedo al coche. Los viajes deben suponer algo positivo para ellos por eso el destino final del viaje también debe ser agradable para evitar problemas de comportamiento asociados a los viajes.
- En la cuarta fase, estamos listos para hacer un viaje largo con nuestro pequeño. Para ello, prepararemos al animal para él mismo como explicamos en nuestra entrada en el blog: Consejos para viajar con nuestra mascota. No se debe pasar a esta fase hasta que el animal no este totalmente adaptado a la segunda fase del proceso.
¿Qué se debe evitar hacer si el animal muestra signos de miedo?
- Actuar con calma. Se trata de intentar restar importancia a la situación. Los animales presienten nuestro estado de animo por lo que se recomienda que los propietarios no estén nerviosos para no transmitírselo al perro.
- NO castigar ni reñir al perro, sea cual sea su comportamiento. Sólo se logra que las cosas empeoren ya que se le transmite al animal un estado emocional negativo al perro y favorecemos que éste entre en estado de pánico.
- NO acariciar al perro si acude a algún miembro de la familia mostrando señales claras de miedo como gemidos o temblores, porque esto conseguirá reforzar la sensación que tiene el animal de que hay motivos para tener miedo.
Tratar la Fobia al Coche en un Perro Adulto:
Si tenemos un perro que ya ha desarrollado miedo al viaje en coche debemos trabajar con el de que animal deje de asociar el vehículo con la experiencia negativa que le supone. Para ello trabajaremos la desensibilización siempre desde el refuerzo positivo.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que algunos animales tienen un nivel de ansiedad tan elevado cuando están en el coche que será necesario la ayuda y asesoramiento de especialistas para poder solucionar el problema. Os recordamos que en la Clínica Veterinaria Las Lagunas tenemos disponible el Servicio de Etología Clínica para esos casos más complicados.
Pero, teniendo siempre en cuenta este punto, vamos a dar algunos consejos para trabajar con estos animales en casa. Cada fase debe tomar el tiempo suficiente como para que el animal se acostumbre y pierda el miedo al proceso. Bajo ningún concepto se debe pasar al siguiente punto si el perro no ha superado el anterior.
- Empezaremos dejando que el perro se suba y se baje del coche. Y lo premiaremos cuando se muestre tranquilo. En ningún caso se debe forzar al animal entrar en le coche a la fuerza porque solo servirá para provocarle más miedo y ansiedad. Todo el proceso debe ser para el un juego y una experiencia positiva. Si el animal muestra un nivel de ansiedad tal, que no es posible trabajar con él. se debe plantear tratamiento médico específico antes de empezar a trabajar con el perro.
- El siguiente paso consistirá en permanecer dentro del coche por un periodo corto de tiempo sin movernos ni encender el motor. Premiaremos al animal cuando se muestre tranquilo y relajado dentro del coche.
- En la siguiente fase, encenderemos el motor del coche sin movernos,
- A continuación comenzaremos a dar paseos muy cortos con el coche y cuando el animal muestre tolerancia al mismo, iremos subiendo progresivamente la duración de los trayectos. Si el animal muestra signos de ansiedad en algún momento de esta fase se debe volver al principio para comenzar de nuevo del proceso de adaptación.
Administración de medicación para tranquilizar al perro durante el viaje:
Es muy habitual el uso de tranquilizantes y sedantes para viajar con animales que muestran ansiedad en el coche. Sin embargo, el uso de estas medicaciones a día de hoy esta contraindicado por los principales veterinarios especialistas en problemas de comportamiento de nuestro país.
Esto se debe a que el fármaco principal utilizado para estos casos, la acepromacina, disminuye las respuestas motoras del animal pero no su percepción sensorial. Es decir, cuando administramos esta medicación a un perro, éste queda inmóvil y aparentemente relajado por efecto del fármaco pero siente todo lo que está ocurriendo, por lo que su nivel de ansiedad no disminuye. De hecho, puede empeorar porque el animal se siente indefenso en esta situación.
Para saber más de este tema podéis encontrar la opinión del GrETCA (Grupo de Especialidad de Etología Clinica de AVEPA -Asociación de Veterinarios Españoles de Pequeños Animales) en el siguiente enlace.
