¿COMO ENSEÑAMOS A UN CACHORRO A HACER SUS NECESIDADES EN LA CALLE?

Muchos de vosotros habéis incorporado un nuevo miembro a vuestra familia aprovechando las fiestas Navideñas. Cuando hemos terminado el protocolo vacunal del cachorro, llega el ansiado momento de poder sacarlo a la calle y enseñarle a hacer sus necesidades fuera de casa. Pero ¿cómo lo hacemos?

Todos deseamos tener un perro limpio y obediente. Lograrlo no es tan difícil, sólo hay que seguir unas sencillas instrucciones y ser constante en su cumplimiento. Pero antes de explicar cómo hacer que un cachorro elimine en la calle, debemos tener muy claro tres cosas:

En primer lugar, debemos ser conscientes de que solo a partir de los dos meses de edad nuestro perro comienza a controlar sus esfínteres, de tal forma que a desde este momento, poco a poco, se conciencia de que puede aguantar para hacer sus necesidades en el lugar y momento adecuados. Sin embargo, como ya se ha mencionado, está empezando. Tiene que aprender y este proceso de aprendizaje durará hasta que el animal cumpla los seis meses de edad. Es decir, tenemos que tener muy presente que durante este tiempo van a ocurrir “accidentes”. Debemos tener paciencia con nuestro cachorro, porque si nos desesperamos y nos enfadamos con él, sólo lograremos que nos tenga miedo a nosotros o a la calle y nunca aprenderá correctamente donde debe hacer sus necesidades.

En segundo lugar, no podemos pedirle imposibles al animal (que es un perro, no un superhéroe). Si nos marchamos de casa a las 7.00 h de la mañana y volvemos a las 20.00 h, nos vamos a encontrar de todo. Cuando sea adulto podrá aguantar, pero ahora que es un cachorro y que aguante tantas horas sin hacerse nada es pedir un milagro.

Y por último, lo más importante, debido al periodo vacunal en el que los veterinarios os recomendamos que no saquéis a los animales a la calle, vuestro cachorro ha estado haciendo durante un tiempo sus necesidades en casa. Esto significa que en la mente del perro, el “baño” esta dentro de casa (probablemente en cualquier habitación o en el empadador en el que le habéis entrenado a hacer sus cosas).  Al iniciar el proceso de aprendizaje para hacer las necesidades en la calle, veréis que, en muchas ocasiones, después de pasar un buen rato en la calle con el perro para arriba y para abajo, no conseguimos que hagas sus necesidades.  Subimos a casa derrotados y según entra por la puerta....¡Sorpresa! Por muy frustrante que resulte esto es muy normal. No hay que desesperarse. Como ya hemos dicho, para nuestro pequeño el “retrete” esta dentro de la casa y no fuera. Esto hace que en muchas ocasiones nuestro cachorro se aguante hasta llegar al domicilio. Por lo tanto, la clave para que el animal haga sus necesidades en la calle está en enseñarle que hemos cambiado " el baño" de sitio y ahora se encuentra en el exterior.


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El Proceso de Aprendizaje:

Para facilitar el proceso de aprendizaje seguiremos unas normas básicas que ayudarán a facilitar el proceso para nuestro pequeño. Estas pautas son muy sencillas y fáciles de llevar a cabo:

  1. Sacar al animal a la calle con la mayor frecuencia posible. Normalmente, los animales hacen sus necesidades poco tiempo después de comer, por lo que tras la ingesta de alimento, lo ideal es sacar al cachorro a la calle.

2. Debemos procurar anticiparnos para que el animal pueda realizar sus deposiciones en la calle. Si cuando lo sacamos, ya se ha orinado en casa, tardaremos mucho en enseñarle. Por ese motivo, lo ideal es mantener unos horarios fijos y una rutina diaria para las comidas y los paseos.

 3. Inicialmente, como ya hemos mencionado, los cachorros tienen poca capacidad de aguante, por lo que nuestra recomendación es que se saque a la calle el mayor número de veces posible (4 - 5 veces al día por lo menos).

4. Por último, cada vez que el animal deposite en la calle deberemos premiarle para que entienda que debe hacer sus necesidades fuera de casa. Nuestro consejo es que utilicéis premios (incluso bolitas de su propio premio). No hay que darle grandes cantidades, es solo el detalle. Le acariciaremos y le diremos lo bien que lo ha hecho. Con el tiempo podremos ir suprimiendo la administración de estos premios pero inicialmente debemos ser muy constantes para que el animal asimile rápidamente que se le premia por hacer sus necesidades en la calle.



Algunas recomendaciones básicas para facilitar el aprendizaje:


  1. El uso de empapadores retrasa el aprendizaje del animal. Especialmente cuando no los retiramos al iniciar las salidas al exterior. Si el empapador esta presente el animal entiende que hay un sitio en casa en el que está permitido hacer las necesidades, por lo tanto no hay necesidad de aguantar hasta que llegue el momento de salir a la calle.

2. Hay que evitar terminar el paseo inmediatamente después de que el animal haga sus necesidades. Esto puede hacer que el perro asocie orinar o defecar con volver a casa, ya que algunos animales podrían evitar hacer sus necesidades porque no quieren que el paseo termine.

3. ¿Regañamos al animal cuando hace sus necesidades en casa? Nosotros no estamos a favor de los castigos físicos en los animales, ni siquiera con el periódico. Emplear estos métodos solo sirve para que el animal aprenda a temernos y puede ser el detonante de conductas agresivas en el animal provocadas por el miedo en el furuto. Además, la mayoría de las veces no le regañáis de forma adecuada.

Aún así, sabemos que vais a regañarlos. Por ese motivo vamos a explicar aquí como debe hacerse para evitar problemas:

  1.  ¿Cómo hacerlo? A los animales les afecta mucho nuestro tono de voz. No entienden lo que decimos pero comprenden muy bien si estamos contentos, tristes o enfadados por los cambios en la inflexión de nuestra voz. Decirles "NO" con un tono grave  y seco es suficiente para que el animal comprenda que no está haciendo bien. No se debe sermonear al perro porque confundirá la regañina con un premio.

2. ¿Cuándo lo hacemos? Debe hacerse única y exclusivamente se le pillamos infraganti.  Es muy importante que entendáis que no podemos regañarle por "hacer sus necesidades". Orinar y defecar son necesidades fisiológicas básicas, por lo que resulta totalmente contraproducente que el animal interprete que le regañamos por orinar o defecar. Le regañamos por orinar y defecar en un lugar inapropiado y así debe entenderlo nuestro cachorro. Para lograr que nuestro perro entienda correctamente el mensaje, después de decirle que "NO, HAY NO", hay que darle una alternativa "AQUí SI": sacarlo inmediatamente a la calle, colocarlo sobre el empapador o llevarlo a la terraza. Si no vamos a ofrecer una alternativa para que el animal entienda lo que queremos de él, es mejor no regañarlo.

3. ¿Por qué debe hacerse así? Los estudios demuestran que los perros son capaces de razonar. Sin embargo su mentalidad puede compararse con la de un niño de tres años. A un bebé de esta edad no le pedimos que haga razonamientos complejos y tampoco debemos exigírselo a nuestro perro. El perro que se esconde cuando entramos en casa porque se  ha orinado no lo hace porque "sabe que no debe orinarse en casa". No, lo hace porque sabe que cuando llegamos a casa y olemos el orín (no olvidéis que es el sentido más desarrollado en los canes; ellos creen que olemos el pis), le regañamos a él y por eso se esconde. Hay un pis en el salón = van a regañarme.

Pues hasta aquí todos los consejos que podemos daros para ayudaros en la entretenida tarea de enseñar a un cachorro a hacer sus necesidades en la calle. Esperamos que os resulte útil.