PARÁSITOS INTESTINALES EN PERROS

¿Qué es un parásito?

Un parásito es un organismo que vive sobre un organismo huésped o en su interior y se alimenta a expensas del mismo. Durante este proceso en el que el parásito se nutre de otro sin aportarle ningún tipo de beneficio, puede provocarle importantes daños o lesiones que en ocasiones acaban con la vida del organismo que lo hospeda.

Los parásitos que afectan al aparato digestivo se suelen localizar en el intestino, donde se alimentan succionando sangre y nutrientes. Ahí provocan lesiones en los tejidos, con signos como diarrea, moco y/o sangre en heces, vómitos, falta de apetito, pero pueden llegar a producir en casos graves anemia, deshidratación, una obstrucción intestinal y, en el peor de los casos, la muerte.

¿Qué tipos de parásitos intestinales hay?

Hay dos clases importantes de parásitos intestinales que pueden provocar enfermedades en los perros: los protozoos y los helmintos (conocidos vulgarmente como gusanos).

• Los Protozoos: Los protozoos es una clase de parásitos unicelulares y no pueden verse a simple vista. Su mascota puede infectarse al comer tierra infectada o al lamerse las patas o el pelaje contaminados. Una vez ingeridos, los parásitos dañan las paredes del intestino y su mascota no puede absorber los nutrientes de sus alimentos. Puede presentarse diarrea acuosa y con sangre, y el animal puede deshidratarse debido a que pierde más agua en su excremento que la que puede reemplazar bebiendo. Con mayor frecuencia, las mascotas jóvenes son infectadas debido a que sus sistemas inmunológicos aún no están desarrollados lo suficiente como para combatir al parásito.

Los protozoos parásitos del intestino más habituales en perros son :

1. Giardia intestinalis
2. Tritrichomonas foetus
3. Cystoisospora (syn. Isospora) spp.
4. Cryptosporidium spp.
5. Toxoplasma gondii
6. Neospora caninum
7. Hammondia spp.
8. Sarcocystis spp.

Las enfermedades que producen cada uno de ellos, se abordarán en artículos sucesivos del blog, ya que se trata de temas complejos y extensos.

• Los Helmitos: Los helmintos no son otra cosa que los gusanos intestinales. Se dividen fundamentalmente en tres grupos principales. Los gusanos planos o tenias, conocidos científicamente como cestodos; los redondos o lombrices conocidos científicamente como nemátodos y los uncinaria o anquilostomas, que son gusanos hematófagos que se caracterizan porque tiene ganchos en su boca. Las infecciones por helmintos son zoonóticas, es decir se pueden transmitir a los humanos, por eso la importancia de prevenir y desparasitar a nuestros animales.
• •  Los gusanos redondos: Los nemátodos son los parásitos intestinales más comunes en perros y gatos de todo el mundo. Los animales con este tipo de gusanos transmiten la infección a otros animales cuando los huevos de los gusanos se convierten en larvas y están presentes en las heces del animal (excremento). Su mascota puede infectarse al comer tierra infectada, al lamerse el pelo o las patas contaminadas o por beber agua contaminada. Las perras infectadas pueden transmitir la infección a sus cachorros antes de nacer o después por medio de la leche materna.
  •  
• 
  • Las uncinarias son los parásitos intestinales más comunes después de los nemátodos. Las uncinarias son parásitos peligrosos porque muerden con los ganchos de su boca las paredes intestinales de un animal y succionan la sangre. Los adultos anclados en el intestino del perro infectado eliminan huevos en las heces de su hospedador. De estos huevos eclosionan las larvas. Su mascota puede infectarse cuando la larva penetra la piel del animal o la mucosa interna del hocico. Una perra infectada puede transmitir la infección a sus cachorros a través de la leche materna, pero esto no ocurre en los gatos.
  •  
  • 
  •  
  • Las Tenias: Las solitarias son gusanos delgados y planos, similares a una cinta. Los perros y también los gatos llegan a infectarse con las solitarias al comer pulgas o p
    iojos. También pueden tener ciertos tipos de solitarias al comer roedores infectados. Algunas de estos parásitos suponen una zoonosis para las personas; es decir, el perro puede contagiárselo a los humanos. Así, tanto Echinococcus granulosus (perro) como Echinococcus multilocularis (zorro rojo, mapache y en menor frecuencia perros y gatos), causan zoonosis de gran importancia en salud pública. Ambas infecciones dan lugar a la formación de quistes, localizados frecuentemente en el hígado. Los huevos según son excretados con las heces de los perros, son infectantes para los hospedadores intermediarios, incluyendo a los seres humanos

En próximas entradas en nuestro blog os hablaremos de las principales especies de estos gusanos y cuales son los cuadros clínicos que presentan los perros infestados.

Factores de Riesgo de La Infestación de Parásitos Internos:

• Edad: los cachorros, gatitos y animales viejos tienen un riesgo superior al de los adultos sanos, pues su sistema inmune está mas debilitado. Lo mismo ocurre con las perras que pueden llegar a transmitir algunos de estos parásitos a sus cachorros a través de la placenta o la leche materna.
• Estado de Salud del Animal: esto incluye infestaciones por parásitos externos, pues algunos de ellos son portadores y transmisores de los parásitos internos, el historial clínico y origen del animal.
• Ambiente: Los perros en perreras, que viven en el exterior, que conviven con otros perros o gatos o los perros vagabundos y de caza pueden tener un riesgo superior de adquirir parásitos y pueden requerir una consideración especial.
• Nutrición: El posible acceso a roedores, moluscos, pescado y carne crudos incluyendo vísceras, placentas o fetos abortados pueden ser un riesgo de infección por algunos parásitos. Por eso los animales que vienen en zonas rurales suelen estar más expuestos.
• Localización y viajes: Los perros que viven o viajan (ej: por vacaciones, traslados, instalaciones de transporte, exhibiciones de perros) a zonas geográficas específicas, pueden tener un riesgo superior de adquirir infecciones que ocurran en dichas áreas.

¿Cómo protegemos a nuestro perros de estos parásitos?

Para prevenir que nuestro perro pueda contagiarse con estos parásitos se recomienda seguir unas consideraciones básicas muy sencillas:

1. Desparasitar al animal con un producto completo destinado a tal efecto, por lo menos cada 3 meses.
2. No ofrecer al animal alimentos crudos no procesados, mucho menos sí provienen de matanzas caseras sin control sanitario.
3. Evitar que el animal beba agua de charcas o lagos.
4. Recoger las deposiciones de nuestro perro cuando lo sacamos a pasear.
5. Evitar que nuestro perro, especialmente los cachorros ingieran sus propias heces o las de otros animales. Para saber más sobre este tema puede consultar nuestra entrada en el blog: Coprofagia ¿Por qué mi perro se come las cacas?

¿Cómo prevenimos las enfermedades zoonósicas?

Las medidas importantes de prevención para los propietarios de mascotas son:

1. Practicar una buena higiene personal. Los adultos y los niños deberían siempre lavarse las manos después de manejar tierra y después de tener contacto con sus mascotas.
2. Se debería usar calzado al estar en exteriores para proteger los pies de las larvas presentes en el ambiente
3. Siempre lavar bien los vegetales porque pueden contener parásitos provenientes del suelo infectado.
4. No permitir que los niños de menor edad coman tierra, ni que jueguen en zonas donde haya excrementos de animales.